Casi 17.000 personas acudieron al Wizink Center el pasado viernes 6 de mayo para ser partícipes del fiestón que nos habían preparado los vigueses Siniestro Total. En el Palacio de Deportes madrileño no cabía ni un alfiler. Este concierto de despedida de una de las bandas punteras del punk-rock nacional ha movilizado tanto a los fans, que las entradas volaron en una semana, lo que posibilitó una segunda actuación consecutiva (sábado 7 de mayo) en el mismo escenario, para la cual también se esperaba un sold out que no se dio por muy poco.
Muchos ponemos en tela de juicio que este sea realmente el punto y final de Siniestro Total, y queremos mantener la esperanza de que, más adelante, nos obsequien con su presencia en festivales o en conciertos puntuales. Esa duda, junto al hecho de que contaran con antiguos miembros como Alberto Torrado, Segundo Gandrío y, sobre todo, Miguel Costas, han sido los factores que han convertido el evento en algo tan multitudinario.
40 años se cumplen este 2022 de su debut discográfico, ya que en 1982 se publicaron tanto el EP con cuatro temas Ayudando a los enfermos como el primer elepé ¿Cuándo se come aquí? Y se encargaron de recordarnos esa cifra redonda en el título del evento: Siniestro Total, 40 años sin pisar la Audiencia Nacional. Prueba de la larga trayectoria y de la longevidad de esta banda era la media de edad del público. Me aventuraría a aseverar que esta rondaba los cincuenta largos. No fue una congregación de teenagers precisamente. De hecho, desde la grada se observaba cómo predominaban las cabezas canosas, si no despejadas, y las panzas, cuyo volumen seguramente se logró trabajando duro y con encomiable constancia el jugo de cebada y el torrezno soriano. Y sí, digo desde la grada, porque nuevamente nuestros directivos han fracasado con estrépito a la hora de pedir acreditaciones. Pero basta de lamentos estériles y pasemos a desgranar el recital.
Con un cuarto de hora de retraso respecto a la hora estipulada para el inicio del show (21:30), se apagaron las luces y sonó la melodía de la serie «ochentera» Corrupción en Miami, que tantas veces han usado estos vigueses como introducción de sus conciertos. ‘Tan hermoso’ fue el tema inicial que encadenaron con la versión del ‘Rockaway Beach’ de Ramones (‘Rock en Samil’) y con una ‘Assumpta’ recibida con júbilo y coreada por gran parte de la audiencia. Otros dos clasicazos de la banda como son ‘Ay Dolores’ y ‘Opera tu fimosis’ completaron el bloque inicial, tras el cual Julián Hernández se dirigió por primera vez al público, para explicar que el origen de los mayores problemas a los que se enfrenta el mundo actual se resume en el título de la siguiente canción del repertorio, y es que ‘España se droga’. Continuaron con otro himno muy coreado también, ‘Camino de la cama’, seguido de otro corte del mismo álbum ‘Todo por la napia’ que, al parecer, sirvió de inspiración a algún que otro compañero de grada, puesto que se mostraban más entregados a la causa y con cierta regularidad pedían amablemente a un servidor que les permitiera el paso, para despejarse y volver al poco con fuerzas renovadas. El noveno tema elegido, ‘La paz mundial’ fue el único del álbum del 2010 (Country & Western) que sonó durante la velada. ‘Pueblos del mundo, ¡extinguíos!’ volvió a encender a los asistentes, a los que Hernández les recordó jocosamente que habían pagado una entrada para verlos cantar a ellos.
Con ‘Chusma’ comenzaron las apariciones puntuales de antiguos miembros (exceptuando la de Miguel Costas que participó en todo el concierto), en este caso, fue Segundo Grandío el que se unió a la banda, tocando así este tema con dos bajistas. Prosiguieron con ‘La cultura popular’, que da nombre al disco en directo de versiones de 1997, ‘Yo dije yeah’ y la versión de Obús ‘Vamos muy bien’. La decimoquinta tonada fue una de las favoritas de quien escribe, la cachonda ‘Diga qué le debo’, y en las dos siguientes (‘Fuimos un grupo vigués’ y ‘Sobre ti’) Julián Hernández y Miguel Costas delegaron sus funciones de vocalistas, primero en el guitarrista, Javier Soto, y luego en el bajista, Óscar Avendaño. Tras ‘Tipi, dulce tipi’ y la única canción que sonó de su último álbum, ‘El chico de ayer’, subió al escenario el primer bajista de la formación, Alberto Torrado, para cantar ‘Tumbado a la bartola’, llegando así al ecuador del show.
El segundo bloque se inició con cinco temas de sus dos primeros álbumes: ‘Nocilla, qué merendilla’, ‘Naturaleza’, ‘Mario (encima del armario)’, ‘Todos los ahorcados mueren empalmados’ y ‘Oye, nena, yo soy un artista’. Acto seguido, algunos pipas de la banda colocaron un set de instrumentos acústicos y Julián Hernández nos comunicó que se disponían a realizar una especie de unplugged, como habían hecho ya muchas grandes bandas de rock, pero que, sin embargo, desembocó en una especie de pérdida de papeles por parte del propio Hernández, que acabó destrozando su guitarra acústica sobre el escenario (algo de lo que, según parece, fue Pete Townshend -The Who- uno de los pioneros), tomó la eléctrica y arrancó ‘Joder, Cristina’. ‘Matar hippies en las Cíes’, ‘Bésame, soy gallego’ y ‘Vámonos al Kwai’, sucedieron al unplugged frustrado y precedieron a un ‘Ponte en mi lugar’ que comenzó con un recordatorio a los antiguos miembros o colaboradores, ya fallecidos y que no pudieron tomar parte de la fiesta. Se rememoró a Juanjo Moreno, Joe Hardy, Pepo Fuentes y Germán Coppini. El concierto continuó con ‘Superávit’, ‘La sociedad es la culpable’ y ‘Emilio Cao’. Luego llegó el momento de la versión de los escoceses The Revillos, ‘Ye-ye’, en la que iban intercalando virtuosos solos de instrumentos (tocando una sola nota cada uno de ellos) con reconocimientos a todos los técnicos que acompañaban a la banda durante la actuación. Tras esos agradecimientos, tres cañonazos muy celebrados por el respetable, a saber, ‘Cuánta puta y yo que viejo’, ‘Ayatollah!’ y la particular versión de Lynyrd Skynyrd ‘Miña terra galega’.
Antes de los bises, ya nos anunció Julián Hernández que harían el típico paripé de largarse, para volver a tocar alguna canción más, por la insistencia del público, pero dando a entender que si no insistían mucho, pues se acababa el show, se iban a casa y tan contentos. Muy a su pesar, los espectadores no pararon de solicitar su regreso y es así que se nos recompensó con cuatro coplillas más. Un estupendo ‘Menea el bullarengue’ que, por inesperado, me entusiasmó el doble de lo normal, su archifamoso ‘Bailaré sobre tu tumba’, un ‘¿Quiénes somos? ¿De dónde venimos? ¿Adónde vamos?’ originalmente enlazado con su clásica versión de AC-DC ‘Somos Siniestro Total’. Un setlist redondo en el que, inevitablemente, se echa en falta alguna canción como ‘Al fondo a la derecha’ o la divertida ‘Alégrame el día’ que sí tocaron al día siguiente.
Se despidieron, se encendieron las luces del Wizink Center y muchos nos quedamos con una sensación agridulce. Dulce por el fantástico fiestón que nos brindaron y agria porque dicho fiestón llegaba a su fin y porque nos quedamos con la duda de si esta ha sido realmente la última vez que hemos podido disfrutar de su presencia sobre el tablado. Crucemos los dedos y toquemos madera.
SETLIST:
1- Tan hermoso (Made in Japan 1993)
2- Rock en Samil (Bailaré sobre tu tumba 1985)
3- Assumpta (Menos mal que nos queda Portugal 1984)
4- Ay, Dolores (En beneficio de todos 1990)
5- Opera tu fimosis (Siniestro Total II: el regreso 1983)
6- España se droga (Policlínico miserable 1995)
7- Camino de la cama (En beneficio de todos 1990)
8- Todo por la napia (En beneficio de todos 1990)
9- La paz mundial (Country & Western 2010)
10- Pueblos del mundo, ¡extinguíos! (Me gusta como andas 1988)
11- Chusma (Sesión vermú 1997)
12- La cultura popular (Cultura popular 1997)
13- Yo dije yeah (Made in Japan 1993)
14- Vamos muy bien (En beneficio de todos 1990)
15- Diga qué le debo (De hoy no pasa 1987)
16- Fuimos un grupo vigués (Me gusta como andas 1988)
17- Sobre ti (Menos mal que nos queda Portugal 1984 -reedición 2002-)
18- Tipi, dulce tipi (Menos mal que nos queda Portugal 1984)
19- El chico de ayer (El mundo da vueltas 2016)
20- Tumbado a la bartola (De hoy no pasa 1987)
21- Nocilla, qué merendilla (¿Cuándo se come aquí? 1982)
22- Naturaleza (Siniestro Total II: el regreso 1983)
23- Mario (encima del armario) (Ayudando a los enfermos 1982)
24- Todos los ahorcados mueren empalmados (¿Cuándo se come aquí? 1982)
25- Oye, nena, yo soy un artista (Siniestro Total II: el regreso 1983)
26- Joder, Cristina (Sesión vermú 1997)
27- Matar hippies en las Cíes (¿Cuándo se come aquí? 1982)
28- Bésame, soy gallego (Popular, democrático y científico 2005)
29- Vámonos al Kwai (Bailaré sobre tu tumba 1985)
30- Ponte en mi lugar (¿Cuándo se come aquí? 1982)
31- Superávit (Siniestro Total II: el regreso 1983)
32- La sociedad es la culpable (En beneficio de todos 1990 -reedición 2002-)
33- Emilio Cao (¿Cuándo se come aquí? 1982 -reedición 2002-)
34- Ye-ye (versión de The Revillos)
35- Cuánta puta y yo que viejo (Me gusta como andas 1988)
36- Ayatollah! (¿Cuándo se come aquí? 1982)
37- Miña terra galega (Menos mal que nos queda Portugal 1984)
38- Menea el bullarengue (Menos mal que nos queda Portugal 1984)
39- Bailaré sobre tu tumba (Bailaré sobre tu tumba 1985)
40- ¿Quiénes somos? ¿De dónde venimos? ¿Adónde vamos? (Menos mal que nos queda Portugal 1984)
41- Somos Siniestro Total (En beneficio de todos 1990 -reedición 2002-)
Estupenda crónica.
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